Está claro que a la mayoría nos gustan las fiestas pero si encima es de esas en las que se cuida hasta el más mínimo detalle... pues más todavía.
La invitación es lo primero que se "saborea" y por eso, si queremos que nuestra fiesta sea todo un éxito (incluso antes de que empiece), hay que currársela un poco.
Se acabaron los eventos de facebook, los emails en cadena y los mensajes por whatsapp y volvamos a las invitaciones en papel de "toda la vida" pero dándoles un toque diferente y original.
Aquí van unas cuantas ideas que se pueden aplicar a cualquier evento.
1. Una guirnalda con la fecha y pocos detalles más generará sorpresa en tus invitados.
2. Pon a prueba sus pulmones con una invitación-globo.
3. Muchas veces lo menos es más...
4. Añade un pequeño (gran) detalle acompañando la invitación.
5. Unas invitaciones muy dulces hechas con retales de tela, botones y fieltro.
6. Personalízala colocando una foto del anfitrión.
7. ¡En una fiesta no puede faltar el confetti!
Con invitaciones así, muy poca gente puede dar un NO por respuesta. Por lo menos yo ni me lo pienso y ¡¡voy de cabeza!! ¿Alguna vez habéis hecho invitaciones caseras?
¡Que paséis un buen lunes!